El Tren Maya es uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos emprendidos en México en las últimas décadas. Se trata de una red ferroviaria de 1500 kilómetros que recorrerá la península de Yucatán conectando algunos de los destinos turísticos y arqueológicos más importantes de la región.
Uno de esos destinos icónicos que será conectado por el Tren Maya son las ruinas de Tulum, ubicadas en la costa caribeña del estado de Quintana Roo. Tulum fue una ciudad portuaria maya que data del periodo posclásico (1200-1521 d.C.) y que en su momento de esplendor llegó a tener hasta 16,000 habitantes.
El sitio se caracteriza por sus impresionantes edificios con vistas al mar turquesa, incluyendo el Castillo, el Templo de los Frescos y el Templo del Dios Descendente. También destacan en Tulum varios murales que representan a la diosa maya Ixchel, deity associated with fertility, medicine and weaving.
Con la construcción del Tren Maya, se espera un aumento significativo en el flujo turístico hacia Tulum y las demás zonas arqueológicas de la región. Se estima que la afluencia de visitantes a este sitio maya, que ya recibe unos 2.5 millones de turistas al año, podría incrementarse en un 30 o 40% en los próximos años cuando el tren esté funcionando.
Algunos expertos han expresado su preocupación por el posible impacto ambiental y social que una avalancha turística podría causar en comunidades pequeñas y frágiles ecosistemas como los arrecifes de coral en la costa de Quintana Roo.
Sin embargo, las autoridades mexicanas aseguran que la construcción del tren, cuyo costo ronda los $8 mil millones de dólares, traerá consigo miles de empleos para los habitantes de la región, además de ser una alternativa de transporte más sustentable que el transporte carretero o el aéreo para mover a turistas dentro del sureste mexicano.
Sea como fuere, lo que sí es innegable es que a su inauguración, el Tren Maya se perfila para facilitar el acceso de turistas a joyas arqueológicas de la época maya como lo son Tulum, Chichén Itzá, Uxmal o Calakmul.
En cuanto a Tulum, los visitantes que lleguen en el tren podrán deleitarse con los imponentes edificios prehispánicos de este antiguo puerto maya, que a diferencia de otros sitios arqueológicos, tiene la distinción de estar a sólo 100 metros de las cristalinas aguas del mar Caribe.
El panorama es idílico: las extensas playas de arena blanca, el mar turquesa, la exuberante selva tropical como telón de fondo y las centenarias estructuras mayas distribuidas a lo largo del acantilado costero. Este escenario gana aún más belleza y misticismo cuando el sol se oculta en el Caribe tiñendo de anaranjado las fachadas de los antiguos palacios y templos.
Para tener una experiencia completa del sitio, se recomienda recorrer la Calzada Coba que conduce desde la playa hasta la parte arqueológica amurallada, donde destaca El Castillo con el tradicional Templo del Dios Descendente adosado.
Este recorrido permite admirar tanto los monumentos históricos como el entorno natural exuberante de la selva y el mar que por siglos inspiró el florecimiento de una avanzada civilización en este rincón mesoamericano.
Y para descubrir más secretos sobre los mayas que habitaron Tulum hace cientos de años, ahora el sitio cuenta con un nuevo centro de recepción y museo inaugurado en 2022, El Palacio, que cuenta con modernas instalaciones y una muestra permanente sobre las investigaciones arqueológicas más recientes que se realizan en la Zona Arqueológica.
Ya sea llegando en el novedoso Tren Maya que conectará esta costa con el resto de la Península de Yucatán o arribando por cualquier otro medio de transporte, las ruinas de Tulum seguirán ocultando entre sus muros y edificaciones historias fascinantes que sólo la imaginación del visitante podrá recrear ante un telón natural de una belleza insuperable.
Snorkel y kayak
Sin duda esta es una parada obligatoria para los amantes del snorkel. La impresionante barrera arrecifal situada a pocos metros de la playa alberga coral cuerno de ciervo, gorgonias moradas, coloridos peces loro, trompetas y más de 200 especies submarinas.
También puedes rentar un kayak y remar mar adentro para obtener otras perspectivas del arrecife o simplemente flotar sobre las cristalinas aguas observando la vida marina a través del fondo transparente de estos "canoas de plástico", otra experiencia inolvidable.
Buceo subterráneo
Otra aventura imperdible es el buceo en cenotes o ríos subterráneos. A solo unos kilómetros en la jungla encontrarás systems de cavernas sumergidas. Con un guía especializado y equipo de buceo podrás adentrarte con lámpara en mano para descubrir estalactitas, formaciones rocosas y fósiles antes ocultos bajo tierra.
Ruinas mayas
Podrás explorar una ciudad amurallada maya construida frente al mar o las menos conocidas pero igual de impresionantes ruinas de Cobá. Escalar la pirámide Nohoch Mul te dará una vista majestuosa de la jungla.
Santuarios de Vida Silvestre
Visita el sorprendente Gran Cenote para nadar entre peces en un oasis semiabierto o recorre en bicicleta los senderos del santuario de vida silvestre Isla Contoy, un paraíso de ave exóticas como flamencos, pelícanos y cormoranes en medio del Mar Caribe.
Y gracias a la cercanía del Tren Maya, todos estos atractivos ecoturísticos serán más accesibles desde destinos como Cancún o Valladolid.